¿Qué es un kit solar de autoconsumo? Los kits solares de autoconsumo son un conjunto de elementos que sirven para aprovechar la energía recibida del sol y convertirla en electricidad. Sus componentes son los siguientes: panel solar fotovoltaico, inversor, estructura, cableado y conectores, y, en el caso de sistemas aislados de la red eléctrica, baterías y regulador de carga.
A continuación, se va a detallar el funcionamiento de cada elemento:
Panel solar fotovoltaico
Los paneles son el elemento que convierte la radiación solar en energía eléctrica debido a la captación de fotones y a la variación de tensión que eso genera. La corriente eléctrica que se genera es corriente continua y, como en la red se emplea la corriente alterna (gracias a Tesla), se debe conectar un inversor para transformar dicha corriente.
Existen dos grupos principales en los paneles solares: monocristalinos y policristalinos. Los primeros son los más eficientes y pueden generar electricidad en momentos o días con poca radiación solar, pero son más caros que los policristalinos. Por otro lado, los policristalinos son los más vendidos en proyectos pequeños y medianos debido a su relación eficiencia-coste.
Inversor
El inversor convierte la corriente continua en corriente alterna, adaptándola a las necesidades de la red. Los inversores pueden ser monofásicos (230V) o trifásicos (400V) y su frecuencia siempre es de 50Hz.
Los inversores que hay en el mercado incorporan, o pueden incorporar, ciertos elementos electrónicos para el control de la instalación como puede ser el sistema de vertido cero (para evitar que se vierta energía a la red), optimizadores de potencia, conexiones wifi para monitorizar la generación, etc.
Batería
Las baterías son los elementos que pueden almacenar energía, como las pilas, y mediante reacciones químicas, pueden absorber o ceder energía eléctrica. Las baterías están compuestas por diferentes combinaciones de elementos, pero las más utilizadas en el sector fotovoltaico y tecnológico (móviles, portátiles, tablets…) son las baterías de Ion-Litio.
Estás baterías tienen una elevada capacidad energética, pueden soportar muchos ciclos de carga, tienen poco efecto memoria (reduce la capacidad de las baterías por realizar mal las cargas) y tienen un alto rendimiento. Por el contrario, se degradan con altas temperaturas, lo que hace que se les tenga que añadir sistemas de seguridad que encarecen el precio.
Estructura
La estructura es lo que sujeta el panel solar fotovoltaico y puede ser coplanar o con una inclinación. Los coplanares mantienen la orientación e inclinación de las superficies (normalmente tejados) y los otros, pueden fijar los módulos con una orientación e inclinación determinados.
En superficies inclinadas, normalmente si instalan estructuras coplanares, para mantener la estética del edificio. Por el contrario, si las superficies son planas, las estructuras que se instalan suelen estar orientadas para obtener la mayor producción fotovoltaica o la que mejor case el consumo y la generación.
Ahorros
Tras hablar de los componentes, queda detallar los beneficios. Los kits solares de autoconsumo sirven para producir energía y, con ello, reducir el coste de la factura. Dependiendo de las características del kit y del consumo de la vivienda o empresa, los ahorros pueden variar enormemente.
Como ejemplo, para una vivienda particular, los kits más vendidos están entre 2 y 3 kW. Con una inversión de en torno a los 4.000€, la amortización se sitúa en 8-9 años y la rentabilidad del proyecto a lo largo de la vida útil de la instalación puede estar en los 10.000€. En conclusión, la persona que invierta en kits solares de autoconsumo puede recuperar la inversión y ganar más del doble de lo que ha invertido.
Además, por si el ahorro económico fuera poco, estás instalaciones permiten quitar poder a las grandes eléctricas y contribuir a reducir el cambio climático. El autoconsumo reduce la energía que se necesita de las grandes centrales, de la red, reduciendo así los costes de transporte y gestión. Por tanto, redistribuye la economía. Pero no solo la gente, el estado también se verá beneficiado ya que tendrá que invertir menos dinero en comprar materias primas como petróleo y gas para producir electricidad.
Por último, cada kWh que se genera con paneles solares fotovoltaicos contribuye a que nuestro país no emita tantos gases de efecto invernadero a la atmosfera. Se ha estimado que, por cada kWh producido con energías renovables, se evita la emisión de 0,246kg de CO2 (Dato obtenido del mix eléctrico español, Red Eléctrica de España 2018). Esto quiere decir que las instalaciones de autoconsumo mejoran la calidad del aire, reduciendo los casos de enfermedades tanto respiratorias como cardiovasculares, lo que conlleva a la mejora de la salud de la población.
En resumen, las energías renovables reducen la contaminación, mejoran la salud de la gente, redistribuyen la riqueza e incentivan la economía local, ¿qué más se puede pedir?